La importancia de cuidar el mobiliario urbano

Desde pequeños lo estamos viendo. En las calles, en los parques, en las carreteras… todos los elementos instalados en la vía pública tienen carácter de mobiliario urbano y, por tanto, es tarea de todos preservarlos y cuidarlos. El mobiliario urbano sirve para cubrir determinadas necesidades del ser humano. Una de ellas es el deseo de encontrar asientos en la calle, de ahí que se instalen bancos, sillas o poyetes en las calles para que podamos sentarnos fuera de nuestro espacio privado. Otro caso puede ser el deseo de arrojar los desechos sin ensuciar la vía pública. De ahí que haya papeleras y contenedores específicos para cada tipo de producto que nos ayude a reciclar y a mantener limpia la vía pública.

Campañas para el cuidado del mobiliario urbano

A lo largo de la Historia, las Administraciones Públicas han invertido tiempo y esfuerzo en potenciar diferentes campañas que conciencien a la población de la importancia de cuidar el mobiliario urbano. “También es tuyo”, por ejemplo, fue un lema de una campaña de sensibilización con elementos de nuestro entorno. Se apela a la ciudadanía para que el individuo sienta el mobiliario urbano como una propiedad común. En este caso, la propuesta etiquetaba los elementos de la vía pública (bancos, papeleras, farolas, carteles, etc.) con su coste real. De este modo, los ciudadanos veían el valor de las cosas de su entorno conociendo el coste que ha supuesto para las arcas municipales, como forma de concienciar sobre el valor de las cosas. Esta ha sido una de las campañas, pero hay muchas. De hecho, desde los Ayuntamientos y las propias empresas no se escatima en esfuerzos para comprometer a la población con el respeto por su entorno. Gracias a los elementos externos podemos tener una vida más confortable y respetuosa con el medio ambiente y con el resto de la sociedad.